El Código Nacional de Procedimientos Civiles y Familiares publicado en el DOF el día 07 de junio del 2023 nos establece diversos procedimientos ordinarios y especiales teniendo todos como principio de la oralidad. De acuerdo con el numeral 456 donde nos señala que toda controversia de naturaleza civil que no requiera un trámite especial en el Código se ventilara en el Juicio Ordinario Civil.

https://centrocarbonell.online/2023/06/26/etapas-procesales-del-juicio-ordinario-civil-oral-en-el-codigo-nacional-de-procedimientos-civiles-y-familiares/

Caso: “La Sucesión de Don Héctor Ramírez”

Don Héctor Ramírez, de 72 años, era un empresario con varios negocios en México y un patrimonio considerable. Estaba casado con María Lourdes López, y tenia dos hijos Carlos (45 años) y Lucía (38 años).

Durante su vida Don Héctor decidió otorgar un testamento publico abierto ante notario, dejando claros algunos de sus bienes:

1-Casa habitación en la colonia Del Valle a nombre de María Lourdes López, otorgándole usufructo vitalicio, de manera que ella pudiera habitarla o recibir rentas mientras viviera.

2-Terreno en Cuernavaca a su hijo mayor Carlos Ramírez López.

3-Cuenta Bancaria con $5,000,000 MXN a su hija menor, Lucía.

Situación No Prevista en el Testamento:

Don Héctor tenía acciones en la empresa “Ramírez e Hijos, S.A.” que no menciono en el testamento.

También contaba con un automóvil clásico y obras de arte que no quedaron especificadas en su testamento.

Tras el fallecimiento de Don Héctor surgieron conflictos entre los herederos:

María Lourdes López reclamó que, además del usufructo de la casa, debería recibir parte de las acciones, argumentando que eran un bien común de la familia.

Carlos sostuvo que el testamento debía cumplirse estrictamente y que los terrenos le pertenecían en propiedad plena.

Lucía alegó que las acciones de la empresa y los bienes no mencionados debían repartirse conforme a la sucesión legitima, es decir conforme a lo que establezca  la ley para los herederos forzosos.